sábado, 29 de septiembre de 2007

PARA REIVINDICARME


Cuando eramos niños, nuestra madre no nos permitia, por motivo alguno, pedir una recompensa por un favor hecho. Recuerdo que nos decía: TÚ decidiste hacerlo y no tienes que pedir dinero por algo que hiciste por TU gusto.
Esto viene a colación porque hace unos días, por mi necesidad económica me vi en otra necesidad, la de pedirle trabajo a un familiar, me dijo que sí, sin embargo me enteré por terceras personas que este familiar juzga mis hechos pasados; de adolescente fui irresponsable, flojo, dependiente, entre otras características que marcaron la percepción que tienen los otros de mí. Es por esto que ha decidido no ayudarme. No me inquieta mucho porque afortunadamente tengo trabajo, sin embargo lo que me molesta es que él no me lo haya dicho. Finalmente, de mi parte sé que he ayudado y puedo serguir haciéndolo a todas las personas que se han acercado a mí.



No le doy la razón, no intento decir que he cambiado mucho de adolescente a la fecha. "Por sus hechos os juzgareis" se dice por ahí; lo único que me queda para reivindicarme es intentar tener una vida ejemplar; aunque esto me lleve otros 29 años...

viernes, 28 de septiembre de 2007

EL QUE NO ESCUCHA CONSEJO...

El ritmo actual de vida en esta ciudad (Distrito Federal) es dictaminado por la economía, a ojo de buen cubero y sin pretenciones de economista, concluyo que mi correr diario es por ganarme la papa, como se dice en el barrio.
Estaba en la cotidiana transición de un trabajo a otro y por un motivo que no viene al caso, pasé a casa de mis papás, donde, como es mi costumbre, me quejé del horario de trabajo que tengo en mi turno nocturno (5:00 pm - 8:30 am), les dije que ya me cansé y que necesito cambiar de trabajo, por lo menos el de la noche. Noté a mi papá meditabundo y luego de unos segundos de reflexión dijo algo que no cito textualmente, sino lo que me acuerdo: "bueno, pero toda rutina cansa, ¿a poco no crees que tu hermano no llega hasta la madre de manejar en las noches?, avienta las llaves y no quiere saber nada del coche..."
Este argumento lo he tenido rumiando toda la tarde y me he dado a pensar que:
a) Mi papá sigue siendo un sabio y que a mi edad, aún lo veo como cuando yo era niño.
b) De nada sirve quejarme, pues sigo teniendo la rutina y no cambiará en un tiempo, pues necesito el trabajo
c) Mientras más me he quejado de la vida, más pesada se me ha hecho; y finalmente
d) No cabe duda que es verdad que la costumbre, es más fuerte que el amor...

jueves, 27 de septiembre de 2007

CON-TACTO

Fui por mi sobrino (V. H.) a la escuela, cursa el primer año de primaria. Saliendo, su mamá le compró una jicaleta, que ya por el puro nombre me parece ridícula, pero ni modo, muy a mi pesar tiene coherencia el nombre con la que la han bautizado.

En la radio oí una canción, la cabeza mil vueltas me dio; y al finalizar, en la estación anunciaban la película de "La Santa Muerte", mi sobrino comentó que no podría soportar un anuncio más de la santa muerte, la pregunta que no a muchos se le hubiera ocurrido y que en ese momento formulé fue ¿por qué? (observen el grado de dificultad cognitivo que tuve que pasar para hacerla); lo que me dijo fue que la había visto anunciada en el cine, y que en la escuela vió un par de hojas con ese nombre, pero que no le habían llamado la atención, por eso no sabía de qué se trataban.

Después de interrogarlo un poco más, me dijo que la Santa Muerte era algo para espantar y que a él ya muy pocas cosas lo asustan, con esa valentía característica de un niño de seis años que al primer "bu" corre a los brazos de mamá.

Después de hablarle de los santos, y su misión en la tierra; intenté explicarle las motivaciones internas y externas que se ponen en juego ante la necesidad de creer que tenermos los seres humanos, razonar junto con él, e intentar llegar a acuerdos sobre lo que podemos hacer desde nuestras creencias. (Él) (Yo) me escuchaba atento.

Lo cierto es que ante mis argumentos, noté en su rostro un poco de admiración ante las vanalidades de nuestro mundo y otro tanto de ganas por conocer esta cosa tan compleja llamada "ser humano". Por mi parte sigo en busca de algo en qué creer. Algún día creí en el Che, tiempo después creí en Marcos, antes creí en el amor, esporádicamente creí en mi fortaleza, aún creo en la vida después de la muerte y en la nada al mismo tiempo. De entre todas esas cosas en las que creí, aún perdura mi creencia en el amor, sin embargo y lo que me mantiene con ánimo no es la creencia en sí, sino la realidad desde donde la vivo...

miércoles, 26 de septiembre de 2007

INCOHERENCIA LOGRADA

Cuando era niño me gustaba pensar en tener un carro, cualquier carro, uno viejo, usado. Conforme fui creciendo me percaté de que tenía mayor reconocimiento tener un auto nuevo y grande. Por fin, a mis 29 años, me compré uno de agencia, no muy grande, "tuneado", que hace que ciertas miradas en la calle se posen en mí; lo cierto es que este simple hecho, el de tener este tipo de carro, no me ha satisfecho del todo ¿para qué tener un carro "bonito" si finalmente, cuando lo conduzco, no lo puedo ver?...

martes, 25 de septiembre de 2007

TERRITORIO CONOCIDO

Cuando una amiga me explicó, con detalles, por qué las mujeres son mas territoriales que nosotros, los hombres, entendí el misterio de los baños de mujeres. Ellas entran juntas porque tienden a orinarse una encima de la otra...